Do You Remember? :::: Los carnavales más alocados [Feb'05]...por Javier Lairado

Con este blog en el que Isak, aparte de contar su vida y sus peripecias, pretende sacar del baúl de los recuerdos diferentes juergas y viajes de estos últimos años, con la proximidad de los carnavales no nos queda otro remedio que recordar aquella loca noche de lunes de carnaval de principios de febrero del 2005.

Yo no tenía pensado salir porque estaba embutido en exámenes de la facultad. Nuestro habitual viaje de casa rural se había pospuesto a dos semanas después. Y, para colmo, llevaba todo el día lloviendo. Las circunstancias sentimentales de uno de nosotros hicieron que saliéramos… y acabamos pasando una de las noches más alocadas que recuerdo.

Con los tres elementos cegados por el alcohol, me tocó el papel de Papi. Isak y Alfonsazo, de heavy; Juanma con su traje de bruja y su característica peluca rosa que lo mismo servía para este disfraz que para vestirse de sevillanas o de prostituta; y yo con un traje de indio rescatado a última hora. Muchas risas, algunas tarjetas de presentación de aquellas que repartía el Deocano, y varios Caciques después, seguíamos en San Atón. Isak montado en un carro del Carrefour tratando de coger una botella del suelo antes de caer rodando. Juanma charlando con un vampigay; Isak, con dolor de cabeza escuchando a una chica hablar y hablar (Carolina la cansina) sin pausa ni descanso; Ricci y la novia para casa. Alicia también.

Cuando nos quisimos dar cuenta éramos los cuatro de siempre más Juanjo, y estábamos en la Plaza de San Juan (la última vez que hemos subido a ella en estas fiestas). Un coche tuvo la temeridad de pasar entre tanto maki y tanto bestia, justo antes de ser manteado. Jamás pensé que uno de nosotros participaría de aquello, pero recuerdo que miré hacia el coche y allí estaba él; con aquella cara de bruto que tanto respeto infundía. Efectivamente, Alfonsazo estaba moviendo el coche como si se tratara de un columpio.

Acabamos la noche con un paseo hacia el coche, que estaba en el quinto carajo, pero que nos vino bien para despejar un poquito la resaca.

Qué nos quiten lo bailao.

Fdo: Javier Lairado