Marwan Viajes

martes, 1 de diciembre de 2009

La gran fuga de "Ezkaba"

La fuga del Fuerte de San Cristóbal se produjo el 22 de mayo de 1938, y en la historia mundial de las evasiones es una de las más destacadas, tanto por el número de fugados como por las sangrientas consecuencias.

En 1938 había 2.487 personas detenidas, en su mayoría dirigentes políticos y sindicales y militantes revolucionarios y republicanos. Estos eran tratados de forma inhumana con maltratos en forma de palizas, hambre extrema y piojos, habiendo constancia de la muerte por esas condiciones de 305 presos, contabilizadas del 1 de enero de 1937 al 6 de julio de 1945, fecha del cierre como penal, como se ha relatado con anterioridad.

La fuga fue preparada por unos treinta presos de forma minuciosa. La operación se inició a la hora de la cena, momento en que había más dispersión de los guardianes. En distintos grupos fueron desarmando a varios de ellos y tras coger su armamento, se dirigieron a donde estaba cenando la compañía de soldados de guardia. Un soldado que opuso resistencia, murió como consecuencia de un golpe con una barra. Posteriormente rindieron también a los soldados de las garitas. En una media hora el fuerte fue tomado por los reclusos, que salieron al exterior.

Un soldado que volvía de Pamplona se apercibió de lo que estaba ocurriendo y bajó a la ciudad a dar la voz de alarma. Además, un preso, el falangista Ángel Alcázar de Velasco, encarcelado tras los sucesos de abril de 1937 en Salamanca, también corrió monte abajo para avisar.

Cuando los camiones de los militares con grandes reflectores se acercaron hacia el fuerte, algunos de los presos desistieron en su fuga, de tal forma que fueron contabilizados, a las dos y media de la madrugada, 1.692 presos. Se fugaron, por tanto, 795 de los detenidos, que iban mal calzados y vestidos, desnutridos, con escasos fusiles y en desbandada, sin organizar un plan de huida. Se inició inmediatamente la caza de los mismos, que sin apenas resistencia fueron siendo abatidos y detenidos. Consta que el mismo día 23 se detuvo a 259 evadidos, el día 24 ya eran 445 y los días sucesivos a grupos menores. El último fue capturado el 14 agosto, tres meses después, siendo apodado "Tarzán", por aguantar tanto tiempo sólo en el monte.

De los 795 fugados fueron detenidos 585, pasando sólo la frontera francesa tres de ellos, e identificando 187 cadáveres, a los que hay que añadir 24 muertos más sin identificar. Esto da, según la contabilidad del fuerte, cuatro más, que pudieran ser huidos de la represión en la retaguardia encontrados tras las intensas pesquisas desarrolladas para capturar a los fugados del fuerte. Aunque la mayor parte pereció en Ezcabarte, que es la cara norte del monte, en Oláibar y en Baztán, la mayoría está registrado en Ansoáin en la falda sur del monte. En total, 211 asesinados durante la captura de los fugados. De los capturados, 16 fueron sometidos a juicio acusados de ser cabecillas, uno fue internado en el manicomio de Pamplona y 14 de ellos fueron condenados a muerte. Estos fueron fusilados en la Vuelta del Castillo, detrás de la ciudadela el 8 de septiembre de ese mismo año: Gerardo Aguado Gómez, Teodoro Aguado Gómez, Bautista Álvarez Blanco, Calixto Carbonero Nieto, Antonio Casas Mateo, Daniel Elorza Ormaetxea, Antonio Escudero Alconero, Ricardo Fernández Cabal, Francisco Herrero Casado, Francisco Hervas Salome, Primitivo Miguel Frechilla, Miguel Nieto Gallego, Rafael Pérez García y Baltasar Rabanillo Rodríguez.

En las posteriores diligencias aparece el delator falangista Ángel Alcázar de Velasco, que vio reducida su pena. Con la reducción de penas también se vieron agraciados otros 60 internos, por colaborar. El director del establecimiento, Alfonso de Rojas, fue destituido de su cargo.

Seguidamente se hace una referencia, según el origen, de los abatidos en los montes, de mayor a menor cuantía:

26 de Pontevedra
21 de Valladolid
17 de Segovia
14 de La Coruña
13 de León
9 de Salamanca
8 de Navarra
7 de Burgos
6 de Cáceres
5 de las provincias de Orense y los mismos de Vizcaya
4 de cada una de las provincias de Álava, Asturias, Cantabria, y de Lugo
3 de cada, de Guipúzcoa, Jaén, Palencia, y de La Rioja
2 de cada, de Barcelona, Ciudad Real, Huelva, Madrid, Portugal, Toledo, Valencia, Zamora, y de Zaragoza
1 de las provincias de Alicante, Ávila, Badajoz, Cádiz, Cuenca, Granada, Murcia y de Soria.
El total de muertos como consecuencia de la fuga ascendió a 225 personas.


Han sido muchos los homenajes que han recibido estos autenticos héroes de la Guerra Civil, pero en Aquí no se habla Portugués... nos quedamos con estos dos: Un documental sobre dicha fuga y la canción del grupo navarro Barricada, "22 de Mayo".

DOCUMENTAL



BARRICADA - 22 DE MAYO



P.D: Como gritó con toda su alma Leopoldo Cámara (fugado)...
¡VIVA LA LIBERTAD!

1 comentario:

Unknown dijo...

joder... Si esto hubiera ocurrido en nuestros tiempos, probablemente todos estarian vivos y libres.