Las cenas de empresa

En estas fechas tan señaladas, todo aquel que tiene la suerte de trabajar dispone de la celebración de unos actos que al final siempre terminan convirtiendose en un despiporre. Este fenómeno se conoce popularmente como "Cenas de Empresa".
En las cenas de empresa todo es un desfase. Se reunen todos los trabajadores de la misma, dejando rencillas a parte y todo es como un anuncio de compresas donde la felicidad y la falsedad inundan el ambiente al "Fifti-fifti". La gran mayoría de la gente que asiste incrédulos a este fenómeno van con 27 copas de más, se atreven con todo, incluso de tirarle los trastos a todo lo que se mueva. Se aprovecha para pedirle a los jefazos todo aquello que en condiciones normales ni te atreves a comentar (vacaciones, subida de IPC, días de asuntos propios...), pero partes con la gran ventaja que también en la mayoría de las ocasiones, el jefe va con 4 copas más que tú por lo que le podrías pedir hasta beneficiarte a su mujer y el tio capitularía sin condiciones.
Pero si por algo las cenas de empresas son famosas es por el gran momento de la noche, la "Barra libre". Es en este lugar dónde el ser humano da lo mejor de sí mismo. Capaz de bailar el "Bulería" del Bisbal con la corbata en la frente, el vaso del cubata, cargado más que nunca, sujeto con la bragueta del pantalón y estar a la pata coja mientras intenta agarrarse a una mega-conga que recorre todo el salón. Es allí dónde, por fín y tras mucho tiempo haciendo el canelo, consigue tirarle los trastos a la persona esa que tanto le atrae esa noche...y digo esa noche porque cuando esta en la oficina como que "ni fu ni fa".
La perversión llega hasta puntos insospechados cuando a la que le entras es a la jefa. Ahí la cosa cambia porque te unen también los intereses de los compañeros y por la clase obrera lo que sea.
En fin, que cada uno haga lo que tenga que hacer, pero sólo una cosa: Cuando vayaís a cenas de empresas no bebaís porque la gente va como loca con las congas en estas fechas.

Cuídense y hasta la próxima.